Hoy te invoco ser inmortal, extraordinaria compañera que con fuerza y maña, irrumpiste en la historia y conquistaste batallas. Es tu ejemplo luz que ilumina el camino y tu constancia fulgor que satisface ensueños.
Legendaria guerrillera del llano y de la sierra, fragancia de flores, dulce tenacidad, rebelde efigie que atesoras humanismo, solidaridad, respeto y consagración.
Engendro de Mariana, pensamiento y acción, espejo de mujer nueva con excepcionales prismas, que ostentas modestia, coraje y valor.
Leer más Por siempre Vilma en Periódico Universitario.